martes, 14 de junio de 2016

Neré y Canelito, los últimos osos del Pirineo occidental



Tras la desaparición de las osas Fraska y Canelle, a manos de furtivos o en accidente de caza en la vertiente francesa de la Cordillera, la supervivencia de esta especie en el Pirineo occidental depende completamente de que los gobiernos de Francia y España cumplan con sus obligaciones legales y morales, y ejecuten un programa de reforzamiento poblacional con la suelta de una o dos hembras reproductoras procedentes de algún país de Europa meridional con osos pardos.

A falta de voluntad, iniciativa o competencia del gobierno español, todas las regiones o comunidades autónomas pirenaicas, especialmente Aragón, están obligadas a aprobar planes de recuperación de la especie,  un requisito legal que garantizaría que las actuaciones del ejecutivo cuenten con un marco normativo claro de referencia para todos los actores involucrados, con criterios científicos, legales y técnicos contrastados y evaluables, con el respaldo presupuestario que sea preciso para lograr los objetivos establecidos, sin olvidar que la prioridad es asegurar el mantenimiento o recuperación de una población viable en la cordillera pirenaica: 
  • programas de seguimiento de la especie, 
  • persecución del furtivismo,
  • indemnización ágil a los ganaderos afectados por ataque directo a sus rebaños o colmenas, 
  • incentivos a las buenas prácticas que garanticen una cohabitación sin daños, 
  • mejora de hábitats para asegurar su calidad como refugio y fuente de alimentos 
  • valorización de los recursos y actividades económicas del territorio osero, etc.
¿Qué podemos hacer?

  • Apoya con tu firma una petición al gobierno para que active urgentemente un programa de reforzamiento poblacional, con la liberación de dos hembras en el Pirineo occidental. FIRMA
  • Unete a Fondo Natural y apoya acciones directas de apoyo a los ganaderos comprometidos con la conservación, el turismo que respeta el oso y mejora su hábitat. HAZ TU DONATIVO
  • Participa en actividades de voluntariado y ecorutas para conocer y proteger el hábitat del oso y la ganadería extensiva en el Pirineo. VOLUNTARIADO
  • Ayúdanos a promocionar nuestro trabajo, organizando talleres, mesas informativas y actividades educativas, difusión en redes sociales, etc.
  • Compra productos artesanos directamente vinculados con la ganadería y las actividades tradicionales en las zonas oseras del Pirineo: miel, queso, lana, embutido, pastas, etc.


Crónica de una muerte anunciada ?

Mientras que las poblaciones oseras de la Cordillera Cantábrica, y del Pirineo Oriental (resultado de las reintroducciones de los años 90) han evolucionado muy positivamente, sin duda como resultado del buen trabajo realizado sobre el terreno por organizaciones como el Fapas y los gobiernos del Principado de Asturias, Francia y de la Generalitat de Cataluña, la gestión del oso  pardo en el Pirineo occidental por los gobiernos de Navarra y Aragón han resultado un fracaso rotundo, ha costado más de cinco millones de euros malgastados y no ha logrado ni un solo avance en la recuperación efectiva de la especie,  ni siquiera para frenar su declive.
  • En 2004 muere Canelle, la ultima osa autóctona pirenaica, por disparos de un cazador francés en una batida ilegal en el valle de Aspe, cerca del tunel de Somport.
  • En 2006 Francia libera, como medida compensatoria, las osas Fraska y Paluma.
  • En 2006 muere Paluma despeñada, en circunstancias no aclaradas.
  • En 2007 muere Fraska atropellada en Francia por un coche tras el acoso de cazadores
  • En 2010 muere Camille, el ultimo oso autoctono del Pirineo occidental


Desde 2010 sólo dos osos machos sobreviven en esta zona del Pirineo, deambulando ocasionalmente en la vertiente Navarra y Aragonesa, entre los valles de Roncal-Isaba y Ansó, Hecho, aunque la mayor parte del tiempo permanecen en la parte francesa, en el Alto Bearn.

Ultimamente apenas cruzan la frontera, en todo el año 2015 no se han localizado rastros de su presencia en el Pirineo español.
  • Neré es hijo de Pyros y otra osa, ambos de origen esloveno.


Canelito es hijo de la osa pirenaica Canelle y posiblemente de Neré, descendiente del esloveno Pyros. Sobrevivió milagrosamente a la muerte de su madre, con sólo un año de vida.


miércoles, 8 de junio de 2016

Cataluña libera un nuevo oso esloveno en el Pirineo para combatir la endogamia de Pyros

Lleida, 7 jun (EFE).- El equipo técnico del proyecto Piroslife liberó anoche con éxito en el Parque Natural del Alt Pirineu (Lleida) un nuevo oso pardo procedente de la Reserva de Caza de Jelen, en Eslovenia.


Proyecto Pyros Life

La introducción de este nuevo plantígrado tiene como objetivo romper el monopolio reproductor del macho Pyros, un ejemplar también llegado de Eslovenia en 1997 que es el padre, el abuelo o el bisabuelo de casi todos los osos del Pirineo catalán, y evitar así los efectos que esto puede llegar a tener en el vigor reproductivo y en la mortalidad de los individuos de la zona.

Según ha informado el Departamento de Territorio y Sostenibilidad, el ejemplar liberado es un macho de entre nueve y diez años de edad, tiene un peso aproximado de 205 kilos y ha sido bautizado como Goiat, una palabra que, en la variante pallaresa, significa chico joven o soltero.

El traslado de Goiat ha estado monitorizado en todo momento por un equipo técnico, formado por nueve personas, que ha custodiado el animal desde su captura y lo ha transportado por carretera en las condiciones más adecuadas hasta que lo han liberado en terrenos del Parque Natural leridano.

El oso liberado lleva crotales en las orejas para facilitar su identificación en libertad, y también le han instalado emisores convencionales en los oídos, además de un collar emisor GPS que permitirá ubicarlo en todo momento y obtener mucha información sobre sus desplazamientos, hábitos y comportamiento.

Asimismo, se le han tomado muestras para poder obtener su ADN y poder saber así en el futuro si se ha reproducido.

Cuando se agoten las baterías de los emisores, el oso se localizará mediante el seguimiento convencional, es decir, con los rastros dejados por el animal en sus desplazamientos habituales, como excrementos, huellas, pelos y otros indicios, además del trampeo fotográfico.

El oso pardo es una especie que a mediados de los años 90 estuvo a punto de extinguirse en los Pirineos, cuando sólo quedó un reducto de población en la zona atlántica, entre Francia, Navarra y Aragón.

La extinción habría representado, entre otros aspectos, la pérdida de una pieza básica en el ecosistema, y por ello, durante la segunda mitad de esa década, se desarrolló un programa LIFE, coordinado entre Francia y España, con Navarra, Aragón y Cataluña, para la reintroducción de esta especie.

Así, en 1996 se introdujeron dos hembras, Ziva y Melba, y en 1997 un macho, Pyros, todos procedentes de Eslovenia.

El origen fue seleccionado atendiendo estudios que demuestran que los osos balcánicos, del sur de Escandinavia, y los del sur y oeste de Europa pertenecen a una única línea genética, que se explica por el hecho de que se produjo un refugio durante la última glaciación en el sur de Europa. Estos ejemplares se adaptaron y tuvieron cachorros en la zona.

Actualmente se estima que en los Pirineos centrales viven entre 30 y 35 osos, de los cuales siete son machos adultos y diez hembras adultas, en edad reproductora.

Pyros, que ya tiene 27 años y se acerca a la senectud, se ha reproducido en 16 ocasiones entre 1997 y 2016 con seis hembras diferentes, y ha tenido 28 hijos conocidos. EFE